PARA SANTIFICAR EL DOMINGO-SAN ESTEBAN PROTOMÁRTIR

PARA AQUELLOS QUE NO TIENEN LA POSIBILIDAD DE ASISTIR A LA SANTA MISA

Recordamos a nuestros queridos lectores la posibilidad santificar el día Domingo a través de Nuestro Blog.

En la parte superior del mismo se encuentra una pestaña o página donde están los diferentes medios para realizar la Santificación del Día Domingo o Fiestas de Precepto, además de contar con los Sermones de los Queridos Padres: Juan Carlos Ceriani y  Basilio Méramo.

A continuación, los propios de la:

FIESTA DE SAN ESTEBAN PROTOMÁRTIR

Con Conmemoración de la Octava de Navidad

Introito

Los príncipes se sentaron a deliberar contra mí, y los malos me han andado persiguiendo. Ayúdame, mi Dios y mi Señor, porque bien sabes que tu siervo se ocupaba en contemplar tus justísimos mandamientos. Dichosos los que viven sin pecar, los que viven según la ley del Señor. Gloria Patri…

Colecta

Concédenos, Señor, la gracia de imitar lo que veneramos, para que aprendamos a amar a los enemigos, al celebrar el nacimiento para el cielo de quien supo orar también por los perseguidores a Nuestro Señor Jesucristo. Que contigo vive y reina…

Conmemoración de la Octava de Navidad

Concede, oh Dios todopoderoso, que el nuevo nacimiento según la carne de tu Unigénito Hijo, nos libere de la antigua esclavitud que nos mantiene bajo el yugo del pecado. Por N.S.J.C.

Epístola

(Hechos de los Apóstoles, VI, 8-10; VII, 54-60): Esteban, lleno de gracia y de poder, obraba grandes prodigios y milagros en el pueblo. Por lo cual se levantaron algunos de la sinagoga llamada de los libertinos, de los cireneos, de los alejandrinos y de los de Cilicia y Asia, y disputaron con Esteban, mas no podían resistir a la sabiduría y al espíritu con que hablaba. Como oyesen esto, se enfurecieron en sus corazones y crujían los dientes contra él. Mas, lleno del Espíritu Santo y clavando los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios y a Jesús de pie a la diestra de Dios, y exclamó: “He aquí que veo los cielos abiertos, y al Hijo del hombre que está de pie a la diestra de Dios.” Mas ellos, clamando con gran gritería, se taparon los oídos, y arrojándose a una sobre él, lo sacaron fuera de la ciudad y lo apedrearon. Los testigos depositaron sus vestidos a los pies de un joven que se llamaba Saulo. Apedrearon a Esteban, el cual oraba diciendo: “Señor Jesús, recibe mi espíritu.” Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: “Señor, no les imputes este pecado.” Dicho esto, se durmió en el Señor.

Gradual

Los príncipes se sentaron a deliberar contra mí, y los malos me han andado persiguiendo. Ayúdame, mi Dios y mi Señor; sácame a salvo de esta persecución por tu grande misericordia.

Aleluya

Aleluya, Aleluya. Veo los cielos abiertos, y a Jesús que está a la diestra del poder de Dios. Aleluya

Evangelio

(Del Evangelio según San Mateo, XXIII, 34-39): En aquel tiempo, dijo Jesús a los escribas y fariseos: he aquí que Yo os envío profetas, sabios y escribas; a unos mataréis y crucificaréis, a otros azotaréis en vuestras sinagogas y los perseguiréis de ciudad en ciudad, para que recaiga sobre vosotros toda la sangre inocente derramada sobre la tierra, desde la sangre de Abel el justo, hasta la sangre de Zacarías, hijo de Baraquías, a quien matasteis entre el santuario y el altar. En verdad, os digo, todas estas cosas recaerán sobre esta generación. ¡Jerusalén! ¡Jerusalén!, tú que matas a los profetas, y apedreas a los que te son enviados, ¡cuántas veces quise reunir a tus hijos, como la gallina reúne a sus pollitos debajo de sus alas, y vosotros no habéis querido! He aquí que vuestra casa os queda desierta. Por eso os digo, ya no me volveréis a ver, hasta que digáis: ¡Bendito el que viene en nombre del Señor!

Credo

Ofertorio

Los Apóstoles eligieron a Esteban, varón lleno de fe y del Espíritu Santo. Los judíos le apedrearon; y él oraba entretanto y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. Aleluya.

Secreta

Recibe, Señor, los dones que os ofrecemos en conmemoración de tus Santos, para que, así como su pasión los hizo gloriosos, así también nuestra devoción hacia ellos nos purifique de nuestros pecados. Por N.S.J.C.

Conmemoración de la octava de Navidad

Santifica, Señor, por el nuevo nacimiento de tu Unigénito Hijo la ofrenda de nuestros dones, y límpianos de las manchas de nuestros pecados. Por N.S.J.C.

Prefacio de Navidad

Latín

Vere dignum et justum est, æquum et salutare, nos tibi semper, et ubique gratias agere: Domine sancte, Pater omnipotens, æterne Deus. Quia per incarnati Verbi mysterium, nova mentis nostræ oculis lux tuæ claritatis infulsit: ut dum visibiliter Deum cognoscimus, per hunc in invisibilium amorem rapiamur. Et ideo cum Angelis et Archangelis, cum Thronis et Dominationibus, cumque omni militia cælestis exercitus, hymnum gloriæ tuæ canimus, sine fine dicentes:

Sanctus, Sanctus, Sanctus...

Castellano

En verdad es digno y justo, equitativo y saludable el darte gracias en todo tiempo y lugar, Señor santísimo, Padre todopoderoso, Dios eterno. Pues que por el misterio de la Encarnación del Verbo se ha manifestado a los ojos de nuestra alma un nuevo resplandor de tu gloria; a fin de que, llegando a conocer a Dios bajo una forma visible, seamos atraídos por Él al amor de las cosas invisibles. Y, por tanto, nos unimos con los Ángeles y Arcángeles, con los Tronos y las Dominaciones, y con todo el ejército de la milicia celestial cantando el himno de tu gloria, diciendo sin cesar:

Sanctus, Sanctus, Sanctus…

Comunión

Veo abiertos los cielos y a Jesús, que está sentado a la diestra del poder de Dios. Mi Señor Jesús, recibe mi espíritu, y no les imputes este pecado.

Postcomunión

Auxíliennos, Señor, los Misterios recibidos, y que ellos nos confirmen en tu gracia en virtud de tu protección y por intercesión de tu mártir Esteban. Por N.S.J.C.

Conmemoración de la Octava de Navidad

Te rogamos, oh Dios Todopoderoso, que el Salvador del mundo, que nació hoy y por quien somos regenerados a la vida divina, sea también el dador de la inmortalidad. Por N.S.J.C.