PARA SANTIFICAR EL DOMINGO Y DÍAS DE PRECEPTO- NAVIDAD- MISA DE MEDIANOCHE

PARA AQUELLOS QUE NO TIENEN LA POSIBILIDAD DE ASISTIR A LA SANTA MISA

Recordamos a nuestros queridos lectores la posibilidad santificar el día Domingo a través de Nuestro Blog.

En la parte superior del mismo se encuentra una pestaña o página donde están los diferentes medios para realizar la Santificación del Día Domingo o Fiestas de Precepto, además de contar con los Sermones de los Queridos Padres: Juan Carlos Ceriani y  Basilio Méramo.

A continuación, los propios del:

NAVIDAD

MISA DE MEDIANOCHE

navidad

ORNAMENTOS BLANCOS

Introito

El Señor me ha dicho: Mi Hijo eres Tú, hoy Te he engendrado. ¿Por qué se embravecen todas las gentes y maquinan los pueblos planes vanos? Gloria al Padre…

Colecta

Oh Dios, que en esta noche sacratísima hiciste brillar el resplandor de la luz verdadera, concédenos, Te pedimos, que gocemos en el Cielo los gozos de aquella Luz, cuyos misterios hemos conocido en la tierra. Que contigo…

Epístola.

(De la Carta del Apóstol San Pablo a Tito, II, 11-15):

Carísimo: La gracia de Dios, nuestro Salvador, se ha aparecido a todos los hombres para enseñarnos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, debemos vivir sobria y justa y piadosamente en este siglo, aguardando la bienaventurada esperanza y el glorioso advenimiento del gran Dios y Salvador nuestro Jesucristo, el cual se dio a sí mismo por nosotros, para redimirnos de todo pecado y purificar para sí un pueblo grato, seguidor de las buenas obras. Predica y aconseja estas cosas en Nuestro Señor Jesucristo.

Gradual

Contigo está el imperio, desde el día de tu poder, entre los esplendores de los Santos; yo te engendré en mi seno antes de la aurora. Dijo el Señor a mi Señor: siéntate a mi diestra hasta que ponga a tus enemigos por escabel de tus pies.

Aleluya.

Aleluya, aleluya. El Señor me dijo: Tú eres mi Hijo. Yo te he engendrado hoy. Aleluya.

Evangelio

(San Lucas, II, 1-14):

En aquel tiempo salió un edicto de César Augusto, ordenando que se inscribiera todo el orbe. Esta primera inscripción fue hecha siendo Cirino gobernador de Siria. Y fueron todos a inscribirse, cada cual en su ciudad. Y subió José de Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de David, llamada Belén, porque era de la casa y familia de David, para inscribirse con María, su mujer, desposada con él, la cual estaba encinta. Y sucedió que, estando ellos allí, se cumplieron los días de dar a luz. Y dio a luz a su Hijo primogénito, y lo envolvió en pañales, y lo recostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en la posada. Y había unos pastores en la misma tierra, que velaban y guardaban las vigilias de la noche sobre el ganado. Y he aquí que el Ángel del Señor vino a ellos, y la claridad de Dios les cercó de resplandor, y tuvieron gran temor. Mas el Ángel les dijo: No temáis, porque os voy a dar una gran noticia, que será de gran gozo para todo el pueblo: es que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, el Salvador, que es Cristo, el Señor. Y ésta será la señal para vosotros: hallaréis al Niño envuelto en pañales y puesto en un pesebre. Y súbitamente apareció con el Ángel una gran multitud del ejército celeste, alabando a Dios, y diciendo: Gloria a Dios en las alturas y paz en la tierra a los hombres de buena voluntad.

Credo

Ofertorio.

Alégrense los cielos, y salte de júbilo la tierra ante la faz del Señor: porque ha venido.

Secreta.

Te suplicamos, Señor, te sea grata la ofrenda de la fiesta de hoy; para que, con tu gracia, reproduzcamos en nosotros, mediante este santo comercio, la imagen de Aquel que en unión contigo vive y reina por los siglos de los siglos.

Prefacio de Navidad

Latín

Vere dignum et justum est, æquum et salutare, nos tibi semper, et ubique gratias agere: Domine sancte, Pater omnipotens, æterne Deus. Quia per incarnati Verbi mysterium, nova mentis nostræ oculis lux tuæ claritatis infulsit: ut dum visibiliter Deum cognoscimus, per hunc in invisibilium amorem rapiamur. Et ideo cum Angelis et Archangelis, cum Thronis et Dominationibus, cumque omni militia cælestis exercitus, hymnum gloriæ tuæ canimus, sine fine dicentes:

Sanctus, Sanctus, Sanctus

Castellano

En verdad es digno y justo, equitativo y saludable el darte gracias en todo tiempo y lugar, Señor santo, Padre todopoderoso, Dios eterno. Por cuanto, por el misterio de la Encarnación del Verbo, se ha manifestado a los ojos de nuestra alma un nuevo resplandor de tu gloria; a fin de que, llegando a conocer a Dios bajo una forma visible, seamos atraídos por Él al amor de las cosas invisibles. Y, por tanto, nos unimos con los Ángeles y Arcángeles, con los Tronos y las Dominaciones, y con toda la milicia del ejército celestial, cantando el himno de tu gloria, diciendo sin cesar:

Sanctus, Sanctus, Sanctus

Comunión.

Entre los esplendores de los Santos, te engendré en mi seno, antes que el lucero de la mañana.

Poscomunión.

Te suplicamos, Señor, Dios nuestro, hagas que los que nos alegramos de celebrar frecuentemente el misterio de la Natividad de Nuestro Señor Jesucristo, merezcamos alcanzar, con actos dignos, la compañía de Aquel que vive y reina contigo…

INTROITO

GRADUAL

ALELUYA

OFERTORIO

COMUNION