ALEGRÍA DE MORIR – UN CARMELITA DESCALZO – APÉNDICES III – COPLAS DEL ALMA QUE PENA POR VER A DIOS

ALEGRÍA DE MORIR

UN CARMELITA DESCALZO

manos rezandoAPÉNDICES

III

COPLAS DEL ALMA

QUE PENA POR VER A DIOS

(San Juan de la Cruz, 1542-1591)

Vivo sin vivir en mí,

y de tal manera espero,

que muero porque no muero.

En mí yo no vivo ya,

y sin Dios vivir no puedo;

pues sin Él y sin mí quedo.

Este vivir, ¿qué será?

Mil muertes se me hará,

pues mi misma vida espero

muriendo porque no muero.

Esta vida que yo vivo

es privación de vivir;

y así es continuo morir

hasta que viva Contigo;

oye, mi Dios, lo que digo,

que esta vida no la quiero;

que muero porque no muero.

Estando ausente de Ti,

¿qué vida puedo tener,

sino muerte padecer,

la mayor que nunca vi?

Lástima tengo de mí,

pues de suerte persevero,

que muero porque no muero.

El pez que del agua sale,

aun de alivio no carece,

que en la muerte que padece

al fin la muerte le vale.

¿Qué muerte habrá que se

iguale a mí vivir lastimero,

pues si más vivo más muero?

Cuando me pienso aliviar

de verte en el Sacramento,

háceme más sentimiento

el no te poder gozar.

Todo es para más penar,

por no verte como quiero,

y muero porque no muero.

Y si me gozo, Señor,

con esperanza de verte,

en ver que puedo perderte,

se me dobla mi dolor.

Viviendo en tanto pavor,

y esperando como espero,

muérome porque no muero.

Sácame de aquesta muerte,

mi Dios, y dame la vida;

no me tengas impedida

en este lazo tan fuerte;

mira que peno por verte,

y mi mal es tan entero,

que muero porque no muero.

Lloraré mi muerte ya,

y lamentaré mi vida,

en tanto que detenida

por mis pecados está.

¡Oh mi Dios!, ¿cuándo será

cuando yo diga de vero:

Vivo ya, porque no muero?