La alcaldesa comunista de Aguilar de la Frontera tira a la basura la cruz de Cristo

La alcaldesa comunista de Aguilar de la Frontera ha perpetrado la mayor humillación posible contra los cristianos: ha arrancado con una radial la Santa Cruz de las monjitas Descalzas, la ha llevado a un vertedero, y la ha arrojado a la basura.

La decisión de la alcaldesa solo se explica desde un odio profundo hacia los símbolos cristianos, cuyo máximo exponente es la Cruz de Jesucristo.

La alcaldesa ha abusado de la Ley de Memoria Histórica para atacar a la cruz. Y el insulto más grosero es que la comisión de Cultura de la Junta de Andalucía ha avalado esta fechoría argumentando que la cruz “dañaba la estructura del convento” situado junto a ella.

La Cruz de las Descalzas era una cruz sobria y exenta, sin placas conmemorativas de la Guerra Civil, sin ningún significado político. Era el lugar que unía a los vecinos de Aguilar, cada tarde, a la hora del rezo del rosario.

La reacción de la gente de Aguilar de la Frontera ante el derribo de la Cruz no se hizo esperar y, en el espacio en el que se encontraba dicha Cruz, han depositado cruces de madera de diferentes tamaños y ramos de flores con mensajes.