PARA SANTIFICAR EL DOMINGO- TERCER DOMINGO DE EPIFANÍA

PARA AQUELLOS QUE NO TIENEN LA POSIBILIDAD DE ASISTIR A LA SANTA MISA

Recordamos a nuestros queridos lectores la posibilidad santificar el día Domingo a través de Nuestro Blog.

En la parte superior del mismo se encuentra una pestaña o página donde están los diferentes medios para realizar la Santificación del Día Domingo o Fiestas de Precepto, además de contar con los Sermones de los Queridos Padres: Juan Carlos Ceriani y  Basilio Méramo.

A continuación, los propios del:

TERCER DOMINGO DE EPIFANÍA

3-epifania

Ornamentos Verdes

Introito

Adorad a Dios, todos sus Ángeles; lo oyó y se alegró Sión; y se regocijaron las hijas de Judá. El Señor reinó, regocíjese la tierra, alégrense todas las islas. Gloria al Padre…

Colecta

Omnipotente y sempiterno Dios, mira propicio nuestra flaqueza, y extiende, para protegernos, la diestra de tu Majestad. Por N.S.J.

Epístola.

(Carta de San Pablo a los Romanos, XII, 16-21) Hermanos: No os tengáis vosotros mismos por sabios, no devolváis a nadie mal por mal; haced el bien, no sólo ante Dios, sino también ante todos los hombres. Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, tened paz con todos los hombres; no os venguéis, carísimos, sino dad lugar a que se pase la ira: porque escrito está: Mía es la venganza; Yo pagaré, dice el Señor. Así que si tu enemigo tiene hambre, dale de comer; si tiene sed, dale de beber. Porque obrando así, amontonarás sobre su cabeza carbones de fuego. No te dejes vencer por el mal, sino vence el mal con el bien.

Gradual

Señor, las gentes temerán tu nombre, y todos los reyes de la tierra tu gloria. Porque el Señor ha edificado a Sión; y será visto en su majestad.

Aleluya.

Aleluya, aleluya. El Señor reinó, regocíjese la tierra; alégrense todas las islas. Aleluya.

Evangelio

(Continuación del Santo Evangelio San Mateo, VIII, 1-13)

En aquel tiempo, habiendo bajado Jesús del monte, lo siguieron grandes multitudes; y he aquí que un leproso, acercándose, lo adoró, diciendo: Señor, si quieres, puedes limpiarme. Y Jesús, alargando su mano, lo tocó, diciendo: Quiero, sé limpio. Y al instante quedó curado de su lepra. Y Jesús le dijo: Mira que no lo digas a nadie; pero ve a presentarte al Sacerdote y ofrece el don que Moisés ordenó para que les sirva de testimonio. Y al entrar en Cafarnaum le salió al encuentro un centurión, y le rogaba diciendo: Señor, un criado mío está postrado en mi casa, paralítico, y padece muchísimo. Le dice Jesús: Yo iré, y le curaré. Y replicó el centurión: Señor, yo no soy digno de que entres en mi casa, pero mándalo con tu palabra y quedará curado mi criado. Pues aún yo, que no soy más que un hombre sujeto a otros, como tengo soldados a mi mando, digo al uno: marcha, y él marcha; y al otro: ven, y viene; y a mi criado: haz esto, y lo hace. Al oír esto Jesús, mostró gran admiración, y dijo a los que lo seguían: En verdad os digo, que ni aún en medio de Israel he hallado fe tan grande. Así yo os declaro que vendrán muchos del Oriente y del Occidente, y estarán a la mesa con Abraham, Isaac y Jacob en el reino de los cielos; mientras que los hijos del reino serán echados fuera a las tinieblas; allí será el llanto y el crujir de dientes. Y dijo al centurión: Vete, y te suceda conforme has creído; y en aquella hora sanó el criado.

Credo.

Ofertorio.

La diestra del Señor ejerció su poder; la diestra del Señor me ha exaltado; no moriré, antes viviré, y contaré las obras del Señor.

Secreta.

Te suplicamos, Señor, hagas que esta Hostia purifique nuestros pecados y santifique los cuerpos y las almas de tus servidores, para poder celebrar dignamente este Sacrificio. Por N.S.J.C.

Prefacio

Prefacio de la Santísima Trinidad

Latín

Vere dignum et justum est, æquum et salutare, nos tibi semper, et ubique gratias agere: Domine sancte, Pater omnipotens, æterne Deus. Qui cum unigenito Filio tuo, et Spiritu Sancto, unus es Deus, unus es Dominus: non in unius singularitate personæ, sed in unius Trinitate substantiæ. Quod enim de tua gloria, revelante te, credimus, hoc de Filio tuo, hoc de Spiritu Sancto, sine differentia discretionis sentimus. Ut in confessione veræ, sempiternæque Deitatis, et in personis Proprietas, et in essentia unitas, et in majestate adoretur æqualitas. Quam laudant Angeli atque Archangeli, Cherubim quoque ac Seraphim: qui non cessant clamare quotidie, una voce dicentes:

Sanctus Sanctus Sanctus…

 
Castellano

En verdad es digno y justo, equitativo y saludable, que te demos gracias en todo tiempo y lugar, oh Señor santo, Padre todopoderoso y eterno Dios. Quien, con tu Hijo unigénito y el Espíritu Santo, eres un solo Dios, eres un solo Señor: no en la unidad de una sola persona, sino en la Trinidad de una sola sustancia. Porque cuanto creemos, por habérnoslo Tú revelado, acerca de tu gloria, lo creemos igualmente de tu Hijo, y del Espíritu Santo, sin diferencia ni distinción. De modo que, al reconocer una sola verdadera y eterna Divinidad, sea también adorada la propiedad en las personas, la unidad en la esencia y la igualdad en la majestad. A la cual alaban los Ángeles y los Arcángeles, los Querubines y los Serafines, que no cesan de cantar diariamente, diciendo a coro:

Sanctus Sanctus Sanctus…

Comunión.

Se admiraban todos de las palabras que salían de la boca de Dios.

Poscomunión.

A los que nos haces, Señor, gozar de tan grandes Misterios, dígnate, te lo suplicamos, adaptarnos realmente a sus efectos. Por el Señor…

 

INTROITO

GRADUAL

ALELUYA

OFERTORIO

COMUNION