Piénsalo antes de pincharte
No cabe la menor duda de que las élites globalistas tienen para nosotros luciferinos planes –que hoy proclaman abiertamente y sin tapujos– llegando hasta el colmo del cinismo al anunciar que en breve no tendremos nada y seremos felices. Sin embargo ellos lo tienen todo y son radicalmente infelices. De otro modo, se retirarían a disfrutar sus bienes y posesiones y dejarían vivir en paz al resto. El mal no hace feliz a nadie. Sólo causa placer a los psicópatas.
De diversos modos el diablo se apodera de las almas. Y el furibundo deseo de estas mentes perversas de controlarlo todo desde el trono de sus siniestras aberraciones con omnímodo poder, es un tipo de posesión del mal. Casi una encarnación del mismo en ellas. Pues el alma de seres así discurre en la mayor oscuridad: aquella en que la luz de Cristo no encuentra cabida.
Para muestra del nivel de criminalidad y bajeza a la que estos seres han llegado, se incluye el enlace de un video que pone de manifiesto el maquiavélico plan de reducir la población mundial mediante la vacunación masiva. Una vacunación inútil que no ha hecho más que poner de moda la muerte repentina tanto en jóvenes como en viejos o que deja espantosas secuelas en la salud de los afectados por ellas, pues ni evita el Covid ni el contagio del mismo.
Si cada día nos enteramos de más personas famosas que mueren repentinamente, ¿cuántos seres anónimos habrá que añadir a esta cotidiana y fatídica suma?
¿No es sospechoso e insultante, que quienes promueven la vacunación masiva estén a favor de la despoblación mundial, como es el caso del magnate Bill Gates, conocido entusiasta de la eugenesia? ¿Qué sentenciado a muerte espera que el verdugo lo ayude?
Esta mafia globalista, que busca robarle la tierra a los agricultores, despojar a los ganaderos, apoderarse de la industria alimentaria, de las fuentes de agua y que nos bombardea incesantemente con sus “chemtrails” o estelas químicas dispersadas por aviones… ¡es la misma que fabrica lo que quieren inyectarnos en las venas!
Sin duda el “reseteo” de la humanidad ha comenzado con un genocidio de inconmensurables proporciones.
¡Ven, Señor Jesús!
ENLACE VIDEO:
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