Misterios de iniquidad
A DIEZ AÑOS DE LA TRAICIÓN DE LA NEO F$$PX (III)
AUDIO
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El lunes 21 de enero de 2019 se cumplirán diez años de la aceptación y agradecimiento del levantamiento de la excomunión por parte de las autoridades de la Neo Fraternidad Sacerdotal San Pío X.
El sábado 17 de enero de 2009, Monseñor Bernard Fellay partía de Roma con el Decreto en el bolsillo, con firma del miércoles 21 de enero y para ser publicado el lunes 26 de ese mes.
La traición estaba consumada, tras diez años de tratativas, idas y venidas.
A diez años de tal felonía, vamos publicando diversos documentos que la muestran, pues ni siquiera hace falta probarla.
En la entrega de hoy presentamos extractos de cuatro documentos:
— De una Conferencia de Monseñor Lefebvre durante el Retiro Sacerdotal del 9 de septiembre de 1988.
— Las respuestas del Padre Schmidberger, Superior General de la FSSPX en aquél entonces, a la Declaración de Dom Gérard, en julio de 1988.
— Del trabajo de Monseñor Tissier sobre la Carta de Juan Pablo II Ecclesia Dei adflicta, de 1989
— De una Entrevista a Monseñor de Castro Mayer.
Monseñor Lefebvre con Pío XII
DE UNA CONFERENCIA DE MONSEÑOR LEFEBVRE
Retiro Sacerdotal
9 de septiembre de 1988
¿Salir, por lo tanto, de la iglesia oficial? En cierta medida, sí, por supuesto.
El libro del señor Madiran, “La Herejía del siglo XX”, es la historia de la herejía de los obispos.
Si uno no quiere perder su alma, es necesario salir de este medio de los obispos.
Pero no es suficiente, porque es en Roma donde está instalada la herejía.
Si los obispos son herejes (incluso sin tomar este término en el sentido y con las consecuencias canónicas), no es sin la influencia de Roma.
Si nos alejamos de estas personas, es absolutamente como con las personas que tienen SIDA. No hay ningún deseo de contagiárselo.
Ahora bien, tienen SIDA espiritual, enfermedades contagiosas transmisibles.
Si uno quiere mantener la salud, es necesario no ir con ellos.
El Padre Schmidberger
con los Obispos Lefebvre y de Castro Mayer
y los Padres Rifán y Possidente
ANOTACIONES DEL PADRE SCHMIDBERGER
Superior General de la FSSPX
Respuesta a la Declaración de Dom Gérard
Julio de 1988
Dom Gérard: Es perjudicial para la Tradición de la Iglesia ser relegada fuera de su perímetro oficial visible. Esto es contrario al honor de la Esposa de Cristo. La visibilidad de la Iglesia es una de sus características esenciales.
Nota del Padre Schmidberger: ¿No sería conforme al plan de la Providencia que la Tradición católica de la Iglesia no sea reintegrada al pluralismo de la “la Iglesia conciliar”, mientras ésta manche el honor de la Iglesia Católica y oscurezca tanto su unidad como su visibilidad? “Cristo sufrió fuera de las puertas de Jerusalén”, dice San Pablo, y añade: “por lo tanto, para ir a él, salgamos fuera del campamento, vistiendo su oprobio”. (Heb., XIII, 12-13).
Dom Gérard: Es lamentable que los Benedictinos que son descartados sean solamente aquellos que específicamente conservan su tradición litúrgica.
Nota del Padre Schmidberger: Al contrario, es una marca de honor para Le Barroux ser rechazados por los otros benedictinos por haber permanecido completamente leal a la Misa de siempre, y por esta razón convertirse en un maravilloso signo de contradicción.
Dom Gérard: Obtener el levantamiento de la suspensión a divinis para nuestros sacerdotes constituye un punto de vista misionero: que el máximo de fieles (y los jóvenes: estudiantes, scouts, seminaristas) puedan asistir a nuestras Misas sin verse obstaculizados por su capellán o su obispo.
Nota del Padre Schmidberger: Si estos sacerdotes del Barroux se consideran válidamente suspendidos, ¡vivieron durante quince años en pecado mortal! Si piensan que su llamada “suspensión” perjudica la irradiación apostólica, están equivocados: la Cruz es más fecunda que la facilidad. Además, deben preferir a la irradiación misionera del Barroux, que es su propio bien, la irradiación de la Tradición en su cohesión indispensable: se trata del bien común de la tradición. ¡Primacía del bien común!
DEL TRABAJO DE MONSEÑOR TISSIER, ECCLESIA DEI ADFLICTA
1989
La Iglesia de Dios está afligida… ¿Por las consagraciones del 30 de junio? ¿O por la ocupación de Roma y de la Santa Sede por la ideología modernista?
(…)
Por el momento, y desde hace 25 años, el Santo Padre está ocupado por una ideología extranjera a la fe católica.
(…)
¿Cómo pretendéis que el Romano Pontífice pueda, en estas condiciones internas de su mente, gobernar normalmente la Iglesia Católica? Está moralmente impedido.
(…)
Por ejemplo, es imposible que proporcione buenos obispos a la Iglesia, sin exigir de ellos, y a corto plazo, lealtad al Concilio Vaticano II y el reconocimiento de la legitimidad de la Misa Nueva.
En una situación tal, el Arzobispo Lefebvre ha interpretado la intención habitual implícita del Papa, en contra, fatalmente, de la intención actual y explícita de este último.
(…)
Hemos demostrado que las consagraciones son legítimas y no cismáticas, habida cuenta de la Roma ocupada y del Romano Pontífice impedido de gobernar rectamente la Iglesia.
(…)
Concluyamos: la ruptura esencial es bien de naturaleza doctrinal. Pero no se trata de un cisma del Arzobispo Lefebvre con la Iglesia.
Es la ruptura (por no decir el cisma, porque no tenemos la autoridad para pronunciarlo), ruptura de la Iglesia del Concilio Vaticano II y de la Roma ocupada con la verdadera Tradición viviente.
La declaración de excomunión del Arzobispo fiel, de su colega en el Episcopado y de sus cuatro hijos es la declaración oficial por Roma de esta última ruptura: es la Roma ocupada la que declara su ruptura con la Tradición (por no decir su propio cisma y su propia excomunión).
En cuanto a nosotros, no declaramos sino que seguimos en comunión con todos los Papas de la Iglesia Católica, que precedió a esta iglesia conciliar que aflige y mancha el rostro de la Esposa Inmaculada de Jesucristo.
DE UNA ENTREVISTA A MONSEÑOR ANTONIO DE CASTRO MAYER
Enero de 1990
Pregunta: ¿Cree posible una reconciliación con Roma?
Respuesta: No existe oposición entre nosotros y la Roma de los Apóstoles, la Roma Católica regada por la sangre de los mártires. Basta que las autoridades de la Iglesia se reconcilian con la tradición infalible de Roma, que condenen las desviaciones del Concilio Vaticano II y las locuras de este mal “espíritu del Concilio” y la reconciliación será automática, “ipso facto”.
Pregunta: ¿La excomunión lo deja indiferente?
Respuesta: Indiferente, no. Incluso inválida, ella me entristece, porque muestra el lamentable estado donde se encuentra la parte humana de la Iglesia. Muestra la intensidad de la aversión que los miembros actuales de la Jerarquía alimentan hacia lo que la Iglesia siempre ha hecho. Mientras que piden perdón a los peores enemigos de la Iglesia, los luteranos, los anglicanos, los judíos, alejan de su comunión a los hijos más fieles de la Santa Iglesia.
Pregunta: ¿Qué mensaje quiere enviar a nuestros lectores?
Respuesta: ¡Permanezcan firmes en la Fe! ¡Guarden cuidadosamente el tesoro que se les confió, la Tradición católica! Por la gracia de Dios, les transmití eso mismo que recibí de la Iglesia, lo que aprendí en el Seminario en Roma: la doctrina de los Padres de la Iglesia, de los Apóstoles, de Nuestro Señor: Tradidi quod et accepi. ¿Qué es lo que puedo desear si no que todos los católicos guarden inviolable este tesoro inestimable?
La ruptura no puede ser más evidente…
Ahora bien, en Roma tienen SIDA espiritual, enfermedades contagiosas transmisibles… Si uno quiere mantener la salud, es necesario no ir con ellos…
Ya sabemos lo que daría como resultado el test de VIH doctrinal de la Neo F$$PX…
Por ejemplo, Benjamin Greschner, redactor principal de Kathnews, entrevistó al Padre Franz Schmidberger, quien declaró: Con Benedicto XVI la barca de la Iglesia navega en adelante sobre aguas más tranquilas. La rehabilitación del Santo Sacrificio de la Misa en su forma tradicional, el retiro del decreto de excomunión, los debates doctrinales con el Vaticano son actos muy positivos de este pontificado.
Esto prueba hasta que el VIH doctrinal ha causado ya el síndrome de inmunodeficiencia adquirida en la Neo F$$PX.
En efecto, la Fraternidad hoy es sacudida por tratativas secretas que concluyen en señuelos y trampas, como el Motu proprio y el levantamiento de las excomuniones. Un Motu proprio que consagra la nueva misa bastarda como norma, y que sólo da a la verdadera Misa una autorización, de la que no tenemos necesidad desde el indulto a perpetuidad con que la cubrió San Pío V, relegándola en lo extraordinario, reservado a minorías de nostálgicos en curso de desaparición. Un levantamiento de las excomuniones que no hace más que confirmar la validez pretendida de dichas excomuniones…
Aquél que otrora dijo: ¿No sería conforme al plan de la Providencia que la Tradición católica de la Iglesia no sea reintegrada al pluralismo de la “la Iglesia conciliar”, mientras ésta manche el honor de la Iglesia Católica y oscurezca tanto su unidad como su visibilidad? “Cristo sufrió fuera de las puertas de Jerusalén”, dice San Pablo, y añade: “por lo tanto, para ir a él, salgamos fuera del campamento, vistiendo su oprobio”…, el 19 de febrero de 2016 declaró: En 1975 la Fraternidad fue enviada al exilio. Queremos regresar del “exilio” en el cual estamos actualmente.
Por esto y por lo que aún falta considerar en los días siguientes, las palabras de Monseñor Lefebvre se aplican actualmente a la Neo F$$PX: Si uno quiere mantener la salud, es necesario no ir con ellos…