JORGE DORÉ: POEMA – AQUÍ ESTOY

AQUÍ ESTOY



Aquí estoy: no me importan la burla ni el desprecio

ni el elogio del culto ni el insulto del necio,

abrazado a la base de una cruz milenaria

como el musgo a la roca, con mi esperanza diaria

y esta fe que le tengo que agradecer a Cristo

por quien vivo, respiro, creo, lucho y existo.



Aquí estoy, contemplando como caen los torreones

al choque de paganas y brutales legiones

que arrasan con sus cascos cuanto resta de sano,

de cuerdo, de virtuoso, de inocente y de humano.



En un mundo a la inversa que cabalga al abismo

en el que andar derecho se ha vuelto un heroísmo,

un mundo descreído, satanizado y ciego

que escribe jubiloso su epílogo de fuego,

que en suicida naufragio, se hunde complacido

en aguas cenagosas con su casco podrido.



Es el apocalipsis, es la total locura

de una tierra renuente a la fe y la cordura

que insurrecta, se venga de la gracia divina

pisoteando las rosas y abrazando la espina,

que seduce las almas con placeres mortales

y luego las bautiza con aguas albañales.



Aquí estoy, entre aquellos que en franca apostasía

han hecho del pecado su pan de cada día,

aquellos que detestan el resplandor divino,

el amor y la vida, la verdad y el camino,

aquellos que poniendo su mano en el arado

vuelven atrás la vista renunciando al llamado

del que escribió con sangre la gigantesca historia

que comienza en la tierra y concluye en la gloria.



Aquí estoy. A la sombra de este eclipse total

que encubre el rostro amargo, deforme y cruel del mal,

en medio de los hijos de Judas y Caín

que mientras nos arrastran a un ominoso fin

corrompen cuanto tocan, lo pudren y deshacen.

¡Perdónalos, oh Padre, no saben lo que hacen!