«LAISSEZ FAIRE, LAISSEZ PASSER»
La Sanata Sede, no cede ni cesa…
Sanata: Discurso extenso que resulta tedioso y aburrido debido a su contenido intrascendente, repetitivo e insolvente, y que también está emparentada con el «verseo» o «chamuyo», una habilidad asociada con la condición de porteño que consiste en seducir con las palabras, más allá de las razones.
El jesuita Bergoglio y su secuaz, el también jesuita «Padre» Lombardi, que hace las veces de vocero suyo y del Vaticano en general, parecen ser partidarios de la «sanata» y al mismo tiempo de la frase que encabeza este escrito y que, en su forma completa, concluía con un «LE MONDE VA DE LUI MÊME».
Ciertamente, «el mundo avanza por sí mismo», claro que no se aclara hacia dónde va…
Y uno, que SÍ SABE hacia dónde va, mejor se guarda alguna de esas cosas que sabe (o cree saber) de la misma forma en que también se guarda algunas (o muchas) puteadas, a pesar de que estas últimas quedarían plenamente justificadas, como jamás lo estuvieron antes.
Para entender «el asunto», como primera condición es imprescindible dejar de lado la sanata, no sólo la de los apóstatas conciliares, sino también la de los conservadores, sean éstos tradicionales o de los otros…
«El asunto… una zoncera», diría un decidor y poetazo argentino, irónicamente, y no al modo de Lombardi y Bergoglio.
Pero… ¿de qué se trata?
Pues, de lo de siempre; aquello que parece ser lo único que moviliza hasta el paroxismo a los combatientes conservadores… ya casi que no puedo decir tradicionales puesto que éstos NADA DICEN, y menos se movilizan. De hecho la F$$PX ha colapsado hasta en cuestiones de moral tan, pero tan determinantes para ellos hasta no hace mucho.
Pero ahora… ni eso.
Quedan, eso sí, los blogs conservadores o línea media, que todavía esbozan alguna reacción.
¿El caso?
Resumidamente, en la misma semana en la que Bergoglio recibió a la Jueza (una pentecostal, además) Kim Davies, discretamente, para darle un miserable o casi nulo apoyo en su posición (que, dicho sea de paso, la llevó a la cárcel) contraria al llamado «matrimonio homosexual», el Bergoglio impostor y usurpador concedió una audiencia privadísima (no tan privada, después de todo) a un ex-alumno suyo, un tal Yayo Grassi, que concurrió a la misma con su «amigo del alma», otro señor con el que comparte la cama desde hace 19 años…, situación que el Bergoglio inicuo no ignora, por supuesto.
Pero veamos la sanata de Lombardi respecto de los dos casos.
“Como es conocido, el Papa conserva muchas relaciones personales motivadas pastoralmente con una actitud de gentileza, de acogida y de diálogo”, dijo Lombardi, sacerdote jesuita.
Antes, este mismo viernes, Lombardi emitió una declaración en la que minimizó el saludo que el Papa dio –también en Washington– a Kim Davis, una funcionaria del gobierno de Estados Unidos que fue encarcelada por negarse a firmar actas de matrimonio para parejas del mismo sexo.
Apenas hace un par de días, Davis informó públicamente que se había reunido con el líder católico en la nunciatura apostólica (embajada vaticana) de la capital estadounidense y que cuando lo saludó, el pontífice le dijo que se mantuviera fuerte.
La noticia captó la atención incluso fuera de Estados Unidos, ya que Davis se convirtió en una especie de heroína de la objeción de conciencia y un ícono político debido a su cercanía pública con precandidatos del Partido Republicano.
En su comunicación, el portavoz Vaticano minimizó el encuentro entre ella y Jorge Mario Bergoglio, aclarando que fue un intercambio “de cortesía” y que la mujer estaba mezclada entre “decenas de personas”.
Además, precisó que la “única audiencia privada” la había tenido con un “antiguo alumno” y algunos familiares. Ese ex-estudiante es Yayo Grassi, quien confesó públicamente su homosexualidad y aseguró que conoce al Papa desde hace años.»
La sanata de Bergoglio también sabe expresarse como bien conocemos.
Es de público conocimiento que en mensaje personal de Bergoglio a su amigo y ex-alumno Yayo Grassi, el primero lo tranquilizara diciéndole que nada en su trabajo tenía ni la menor proximidad a la Homofobia (Homofobia: pecado imperdonable que cometen quienes repudian la sodomía al punto de ofender la fina sensibilidad de quienes la practican; algunos teólogos partidarios de la bergogliana «cultura del encuentro» opinan que se trata de un pecado que clama al cielo y no sería perdonable; en todo caso parece reservado a la Sanata Sede).
Por cierto, este es el video de la parejita reunida con el Papa de los maricas:
https://www.youtube.com/watch?v=VaNEbd_8mBo
Ahora bien. Todo esto es sabido, y esperable. De hecho, la defección en la Fe de la casta eclesiástica tenía que derivar en estas cosas; de eso San Pablo habla claramente en Romanos 1: 25 y ss; que antes creo ver anunciado en Salmos 81: 12.
Lo que me molesta mucho más ostensiblemente es tanto bombo y platillo respecto de este tema de los mismos a los que por décadas no les importó ni un poco lo que ocurría con la FE. Y no les importó porque eran TIBIOS… Anfibios, diría don Juan Manuel…
Es lo mismo que ocurre con lo del famoso Sínodo que está a punto de deflagrar, y que repartirá bosta hacia todas las direcciones posibles.
Todo eso hubiera sido imposible, si antes no les hubiera estado permitido fagocitarse a la Fe. Esta última es una forma de hablar. En realidad lo que se han fagocitado, como si de un cáncer agresivo se tratase, es TODO el tejido humano que pululaba en derredor de la estructura eclesiástica; eso primero; y luego y por medio de ese tejido eclesiástico contaminado, se comieron a «il popolo» seguidamente.
Puffff… que hablar de esto en los ‘60, ‘70, ‘80, ‘90, e incluso en los cercanísimos 2000, le valía a quien lo hiciese, de parte de los TIBIOS, el mote de exagerado, cuando no el de impiadoso o irrespetuoso respecto de la figura de los curas, los obispos y, por ende, del papado, sin pensar, sin rumiar, que las cosas que pasaban y las que pasan solamente podían obedecer al colapso, a la traición de la casta eclesiástica, que, a imitación del SANEDRÍN RABÍNICO en tiempos de Cristo, HABÍA PERDIDO MUCHO ANTES LA FE.
Pero ahora, claro, todos los ANFIBIOS están preocupadísimos porque existen muy serias posibilidades de que muy pronto (ya mismo, en realidad), van a tener que soportar la escandalosa situación de tener de compañeros en la fila de «comulgantes», y en igualdad de condiciones, vaya uno a saber qué clase de personajes, desde algunos unidos con consortes truchos provenientes de post-nulificados matrimonios previos, hasta señores lampiños o bigotudos pero… de dudosos esfínteres.
Pero esos TIBIOS, impugnadores hoy de sínodos truchos y de sus conclusiones prefabricadas, cuestionadores hoy de la pastoral bergogliana escabrosa y escatológicamente sodomita, ayer tibios (partidarios de Ratzinger) y ahora febriles-todoterreno impugnadores de Pancho, como también fueron partidarios de “LAISSEZ FAIRE, LAISSEZ PASSER”, no vieron nunca que el origen de sus preocupaciones está muy por detrás en el tiempo.
Sosteniendo su personal batalla contra la única posición posible ante la apostasía, a la vista del cumplimiento de esa frase que dice que «EL PEZ SE PUDRE POR LA CABEZA», ayer ellos se callaron, favoreciendo lo que ahora combaten.
Solamente queda ahora, y había allá entonces, una posición católica posible.
Reconocer que la aceptación de siquiera el UNO POR CIENTO (1%) del Concilio Vaticano II; la sumisión siquiera a UNO SOLO (1) de los escritos, discursos, sermones, documentos, o indicaciones «pastorales» de los llamados «Papas Conciliares»; el sometimiento a su autoridad o a su magisterio orinario (no hay error, lector) desde Roncalli hasta Bergoglio significa contribución a lo mismo que ahora se deplora.
La torta envenenada debió y debe ser rechazada completamente, toda y sin remilgos.
Otra posición era entonces y es en la actualidad un engaño, un engaño que no impide que el mundo avance, por supuesto; el asunto es hacia dónde avanza.
A tenor de las cuestiones tratadas, sin dudas que LE MONDE VA DE LUI MÊME… Sí, sí… y los anfibios con él.
