
ASCENSIÓN MISTICA DE LA MONTAÑA DE LA PERFECCION
POR EL CAMINO DEL AMOR Y DE LA INFANCIA ESPIRITUAL
CANCIÓN 22
Y así por su camino,
Teresa, en paz completa,
Ya gusta las delicias
del árbol del amor;
De sí misma olvidada,
con arpa de poeta,
Ya canta noche y día
las glorias del Señor:
“Mi cruz de cada hora –dice,-
yo la he cubierto
Con flores matizadas
de santa abnegación;
Por eso en dulce música
prorrumpe este mi huerto
Por donde se pasea
libre mi corazón”

