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LA MUERTE DEL JUSTO EMOCIONA HASTA LAS LAGRIMAS, GRACIAS A DIOS TENEMOS A ALGUIEN MAS QUE INTERCEDA POR NOSOTROS. DALE SEÑOR EL DESCANSO Y BRILLE PARA EL LA LUZ QUE NO TIENE FIN, QUE POR TU INFINITA MISERICORDIA LOS FIELES DIFUNTOS DESCANSEN EN PAZ, AMÉN. RESQUIESCAT IN PACE.
Conocí, traté y fue, además de padre espiritual y pastor, un excelente amigo. Hombre de Dios, con una cultura muy basta, como muy pocos la tienen. No puedo ni imaginar el inumerable volúmen de sus lecturas. Amante de los clásicos, lector insaciable, pluma ágil y certera, agudo e ingenioso conversador, amigo como pocos lo son, amante genuino de la naturaleza y buen catador y conocedor de vinos. Su compañía era un verdadero agasajo para el espíritu y el recibir sus cartas nos saturaba de alegría. Tenía la reciedumbre y la nobleza del hidalgo, la sencillez del hombre de Dios, la elocuencia de un profeta y la humildad del santo de Asís. Era un verdadero discípulo de su Maestro: fiel a la Tradición como un roble y simultáneamente fungía como doctor y como comprensivo pastor de las almas pecadoras. Era en suma: un sacerdote auténtico de Cristo, en toda la extensión de su significado. Seguramente, ahora, goza ya del Señor -que muchos méritos tuvo- y desde ahí, ora e intercede por nosotros y por la Tradición.
Soy una pobre ermitañita por la gracia de Dios desde hace 17 años. Yo trate con el P. Sarmiento y fue un guia maravilloso para esta pobre pecadora. Me apoyo y ayudo mucho a vivir en esta forma de vida. Se que ya esta en el cielo y que vela por todos nos.